El Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la participación de niños en los conflictos armados fue adoptado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 25 de mayo del año 2000 y entró en vigor el 12 de febrero de 2002. Este protocolo complementa la [Convención sobre los Derechos del Niño] y refuerza la protección de niños y niñas frente al reclutamiento y utilización en hostilidades, prohibiendo su participación directa en conflictos armados antes de los 18 años.
Gracias al Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño, los Estados Parte se comprometen a elevar la edad mínima para el reclutamiento voluntario en sus fuerzas armadas, a prohibir el reclutamiento forzoso, y a impedir que grupos armados no estatales recluten o utilicen a menores en cualquier circunstancia. El protocolo también obliga a adoptar medidas legales y administrativas para su cumplimiento, incluyendo la rehabilitación y reintegración de niños y niñas afectados por los conflictos.
Este instrumento ha sido clave para fortalecer los mecanismos de protección infantil en contextos de guerra y violencia armada, reconociendo la necesidad de una respuesta integral que incluya cooperación internacional, asistencia psicosocial y participación de las comunidades en la prevención y denuncia de estas violaciones.