La Ley de Comunicación Social, aprobada en mayo de 2023 como Ley No. 164, es la primera norma integral en Cuba que regula los procesos comunicativos en los ámbitos institucional, mediático, comunitario y digital. Según el texto oficial, su propósito es establecer principios y reglas para una comunicación “ética, responsable y comprometida con la verdad, la Revolución y el socialismo”. Esta ley define la estructura del sistema de comunicación del Estado, establece límites a los contenidos y centraliza las decisiones editoriales bajo control gubernamental.
Uno de los aspectos más críticos es que prohíbe expresamente la existencia de medios de comunicación no estatales, negando el derecho a fundar medios independientes. Además, otorga a las autoridades facultades para intervenir, sancionar y censurar contenidos considerados contrarios al “orden constitucional” o al “interés social”. Diversas voces han alertado que esta ley institucionaliza la censura, fortalece la propaganda estatal y limita aún más la libertad de prensa y de expresión en Cuba, tanto en medios tradicionales como digitales.
